Pero @edans lo ha explicado tan bien… El absurdo derecho a que internet te saque por tu lado bueno • El Blog de Enrique Dans
Si la información realmente no debería estar ahí, podría irme a la fuente en la que se publicó y reclamar su borrado, pero nunca ir a quien la indexa, porque lo único que hace – y lo único que debe hacer – es eso, indexar lo que hay.
Como usuario de un buscador, valoro enormemente que esa herramienta sea capaz de ofrecerme lo que la red – toda la red – dice sobre un tema o una persona determinada. …La propuesta de valor de ese buscador se debilita si únicamente puede ofrecerme aquello que “alguien ha decidido que quiere que aparezca”. La idea de pasearme por las hemerotecas arrancando páginas de periódicos porque la información que ofrecieron era errónea o simplemente no me gusta me parece alucinante, totalmente digna del “Ministerio de la Verdad” imaginado por George Orwell en “1984“.
… No se olvida cuando alguien quiere que se olvide, se olvida por otros motivos. No nos pueden obligar o olvidar, y plantearlo es sencillamente atroz. Otorgar a alguien el supuesto derecho a “borrar su pasado” no tiene ningún sentido, y mucho menos si lo que hacemos es eliminarlo no de las fuentes, sino de las herramientas que lo indexan. Lo que tenemos que plantearnos ahora es qué va a pasar cuando semejante planteamiento absurdo caiga en manos de los poderosos, de los gobiernos, y de los que de verdad tienen un interés serio por “modificar” su pasado y el modo en el que este aparece en la red. Esperar y ya veréis qué bonito, cuando la red se pueble de informaciones eliminadas porque a una empresa no le gustaba lo que un usuario decía de ella y ha logrado una orden que le permite quitarlo de los resultados de búsqueda. Ya veréis… una delicia. Cuando las órdenes de retirada de enlaces a contenidos se cuenten por cientos de miles, o por millones. Cuando se genere una “internet paralela” que nadie pueda indexar. …