Esta parece ser la única manera en que se haga algo real por el clima: a la fuerza.

Origen: Crisis mundial, coronavirus y capitalismo moribundo: un cóctel mortal

La deuda global en relación al PIB ha crecido un 322% en el último cuarto de 2019, sobrepasando los 253 billones $. Simplemente una recesión mediana conllevaría que la deuda de las corporaciones capitalistas, de más de 19 billones $, sería sencillamente impagable para muchas de ellas. Las empresas “zombi”, aquellas que quebrarían solamente con subirse los tipos de interés, se estiman en un 10% a escala mundial. Según Bloomberg, las obligaciones de muchos Estados y la salud de los fondos de inversión no es precisamente mejor.

Toda esa desaceleración, sin embargo, fue acompañada una vez más, por la estúpida euforia de las Bolsas, mostrando toda la irrealidad de la economía capitalista y haciendo presagiar desde hace tiempo un considerable estallido de burbuja.

Los Bancos Centrales (en comanda con los gobiernos) ya no saben qué hacer para “salvar” a la economía: desde inyectar “dinero mágico” inventado de la nada, a poner los intereses en negativo, bajar al mínimo los costos laborales (salarios y cotizaciones patronales a la seguridad social), hacer grandes recortes sociales… Pero aun así el enfermo no reacciona. Y no reacciona porque la inversión capitalista está paralizada (en torno al 22% del PIB). La cual a su vez lo está porque no obtiene suficientes beneficios, y no los obtiene porque padece un grave problema de pérdida de valor provocado por una sobreacumulación de capital (debido a la sustitución de personas por máquinas).

Es decir, que estamos desde hace tiempo inmersos en una “crisis sistémica” que afecta la capacidad del capital de reproducirse. Entonces, y de la forma más sorprendentemente extraña posible surge algo inverosímil: una pandemia que mata sobre todo a la población menos “productiva” y con mayor incidencia en el gasto público. Una pandemia salida de… ¿dónde?

El 18 de octubre de 2019, el Johns Hopkins Center for Health Security, en Baltimore (EE.UU.), llevó a cabo una cuidada simulación de una epidemia tipo “corona-virus”, titulada nCoV-2019. Incluso la OMS, que ha actuado más como agente comercial de las transnacionales farmacéuticas que como velador de la salud de las poblaciones del mundo[1], dio primero al virus el mismo acrónimo que el del experimento, para cambiarlo finalmente por el de COVID-19.

En la simulación 201 se llegaba a la conclusión de que el 15% de los mercados financieros colapsaría y que alrededor de 65 millones de personas en el mundo perderían la vida.

Esta parece ser la única manera en que se haga algo real por el clima: a la fuerza. Los golpes de crisis son hasta ahora los únicos momentos en que se han rebajado las emisiones de efecto invernadero en la civilización capitalista.

 

Y más opinión… Origen: Coronavirus y guerra de Big Data

Aunque las apariencias de la guerra comercial engañan, Xi Jimping y Trump están ambos enfrentados a los globalistas financieros, aunque por objetivos diferentes, por ello cooperan en ciertos hechos como los que hacen a las los golpes financieros de la Reserva Federal y la City de Nueva York.

La Guerra de Big Data en 2020

En la actualidad la pugna por el liderazgo en el 5G es una pugna por la dominación en el terreno del Grandes-Datos (Big-Data), estos son los verdaderos motivos que subyacen en la guerra comercial que Washington mantiene con Pekín, dado que la empresa china Huawei ha tomado la delantera en el desarrollo del ´big data´, porque quién controle la red 5G controlara la producción de los Grandes-Datos (Big-Data) y luego, el proceso de la producción social, económico, político e ideológico-cultural.

Trump no quiere quedar retrasado con su proyecto productivo industrialista nacional, por ello espera poder utilizar las Tecnologías del Big-Data para recuperar el terreno perdido en la economía real. De consolidar su posición actual, Pekín (Beijing) bien podría “direccionar” el futuro de la humanidad, al contar con el poder para impulsar y sostener una transición hacia un multipolarismo que implicaría un dialogo pluriversal de naciones unidas y presupondría un poscapitalismo financiero, objetivo que se contrapone particularmente a los intereses globalistas financieros que plantea una coordinación de Cities-Financieras con centro en una oligarquía financiera global en el banco central de los bancos centrales –BIS-.

Que piensan en utilizarlas para lograr dominar el mundo y poder imponer su concepción elitista global unipolar de poder, que implica un gobierno  global sin ciudadanos, que niega lo nacional y las naciones.  Donde el sistema institucional local, se ordenaría a partir de las presidencias de los bancos centrales y sus cities financieras locales en red.

Las tecnologías 5G, con hiper velocidad e interconectividad de dispositivos y sus datos en tiempo real, cobran una importancia medular en el ‘Data Capitalismo’ de las corporaciones transnacionales como Facebook, Apple, Amazon, Netflix, Google (los FANG) y otras empresas globalistas. El ´Big Five´, en  conjunto representaba, a finales de 2019, el 17,4% (contra 11.5% a principios de 2017) del valor de las acciones de Standard & Poors (SPX) y con ello ejercen una influencia en todo el mercado bursátil.

En 2019, el top 34 de SPX obtuvo una ganancia media de 26.8% y las ´Big Five´ obtuvieron en promedio 47.6%, sin lugar a dudas las que más se han beneficiado de los programas de expansión monetaria de la Reserva Federal en estos años.

En el último cuatrimestre de 2019 (Q4`19), el crecimiento anual de los ingresos de los consorcios del ´top 34 de SPX fue del 3.6% y los FANG (Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google) obtuvieron un 15.5%, y sus flujos de caja operativos incluso un 18,7% contra los otros (que, excluyendo a los mega bancos) da apenas un 2.7%. La compañía más poderosa y más importante en la bolsa de valores de New York es Apple. El Ratio entre precio de sus acciones y los ingresos netos de una acción de Apple creció en 87%.

De este modo, los globalistas esperan poder ofrecerse para ´salvar´ la economía mundial de una depresión que ellos mismos están provocando. Proponiendo (imponiendo) la introducción de una cripto-moneda bajo su control y sin dependencia de ningún banco central nacional alguno. Esperan poder ofrecer incluso la vacuna contra el Coronavirus en el momento más crítico de la llamada, por sus grandes medios, ´pandemia´. Coronavirus es una enfermedad que afecta el sistema respiratorio de las personas y es letal en las personas cuyo sistema inmunológico se encuentra debilitado, por ej.: los mayores de 65 años y más específicamente en los de más de 80 años.