El SCRUM es un marco de trabajo prácticamente aplicable a cualquier equipo de personas en entornos productivos en los que la demanda del cliente evoluciona rápidamente, centrándose en los equipos de las personas más que en los procesos.
LA GESTIÓN DE PROYECTOS ÁGIL NO SE FORMULA SOBRE LA NECESIDAD DE ANTICIPACIÓN, SINO SOBRE LA DE ADAPTACIÓN CONTINUA.
Origen: ¿POR QUÉ SCRUM, EN MI ORGANIZACIÓN, NO ES PARA LOS PROGRAMADORES? | LinkedIn
Cuándo es bueno para ti utilizar la metodología SCRUM
No es necesario, ni siquiera conveniente, utilizar la metodología SCRUM en todo tipo de proyectos. Por eso debes saber qué requerimientos debe tener tu proyecto si quieres utilizarla con eficacia:
- Equipos pequeños: cuando en tus proyectos los equipos de trabajo no superan las 8 personas.
- Poca necesidad de documentación: si el cliente te exige que todo el proyecto esté muy bien documentado desde el principio (fases de consultoría y de tomas de requerimientos largas) SCRUM no es tu metodología.
- Proyectos con riesgos de cambios durante el proceso: como la metodología SCRUM ejecuta el proyecto en fases cortas de dos a cuatro semanas, permite mucha flexibilidad a la hora de acometer cambios a mitad del proyecto, ya que tras cada fase se replantean las tareas y los objetivos.
- Confianza en la metodología: serás el encargado de velar que se cumpla, por lo tanto, antes de trabajar en un proyecto con SCRUM debes aprender bien cuáles son sus principios y maneras de operar y sentirte cómodo con ellos, para poder traspasar esa confianza al resto de los actores de tu proyecto.
SCRUM sirve para que equipos multidisciplinares trabajen en entornos complejos, donde los requisitos son muy cambiantes, y los resultados se tienen que obtener en un plazo corto de tiempo.