España ha retrocedido cuatro puestos en la nueva edición, ocupando el puesto 40, el más bajo de los últimos diez años.

El índice World Competitiveness Ranking lo elabora anualmente el Centro de Competitividad Mundial del IMD, con sede en Suiza, y mide las capacidades de 67 economías para ser competitivas, teniendo en cuenta factores que van desde la política fiscal al dinamismo empresarial o la innovación, entre otros.

Origen: España no está entre los 10 países más competitivos: los motivos

¿Por qué España no está en el top ten de países más competitivos?

Las razones principales, según el estudio son:

  • el empeoramiento de la eficiencia gubernamental (cae siete lugares: se reduce la puntuación en finanzas públicas, política fiscal, marco institucional, legislación empresarial y marco societario) y
  • la eficiencia empresarial (un puesto menos: las notas han bajado en productividad, eficiencia y mercado laboral –mide la facilidad que tienen las empresas para acceder a los profesionales con la cualificación requerida, así como el coste de la mano de obra–).

España obtiene mejores resultados respecto a infraestructuras y desempeño económico, manteniendo la posición del año pasado en el primero y mejora cinco puestos en el segundo gracias a subfactores vinculados a precios (inflación y costes de vida) y comercio internacional.

¿Los principales desafíos para la competitividad española? La necesidad de reducir la presión fiscal y generar un marco normativo estable para las empresas; invertir eficientemente los fondos europeos; e, impulsar la digitalización de las empresas, en particular de las pymes.

 

¿Cuáles son los países más competitivos del mundo? Entre ellos, desde luego, no se encuentra nuestro país. Y es que España ha retrocedido cuatro puestos en la nueva edición del ranking internacional de competitividad que elabora la escuela suiza de negocios IMD. ¿En qué puesto se ubica? En el 40, el más bajo de los últimos diez años. ¿A qué responde esta puntuación tan baja?

El índice World Competitiveness Ranking, elaborado anualmente por el Centro de Competitividad Mundialdel IMD, con sede en Suiza, mide las capacidades de 67 economías para ser competitivas, teniendo en cuenta factores que van desde la política fiscal al dinamismo empresarial o la innovación, entre otros.

 

¿Por qué España no está en el top ten de países más competitivos?

Las razones principales, según el estudio, son el empeoramiento de la eficiencia gubernamental (cae siete lugares) y la eficiencia empresarial (un puesto menos). En el primero, en concreto, se reduce la puntuación en finanzas públicas, política fiscal, marco institucional, legislación empresarial y marco societario. Mientras que en el segundo las notas han bajado en productividad, eficiencia y mercado laboral. En este último, se mide la facilidad que tienen las empresas para acceder a los profesionales con la cualificación requerida, así como el coste de la mano de obra.

Respecto a infraestructuras y desempeño económico, España obtiene mejores resultados. De hecho, mantiene la posición del año pasado en el primero y mejora cinco puestos en el segundo gracias a subfactores vinculados a precios (inflación y costes de vida) y comercio internacional.

¿Los principales desafíos para la competitividad española?

La necesidad de reducir la presión fiscal y generar un marco normativo estable para las empresas; invertir eficientemente los fondos europeos; e, impulsar la digitalización de las empresas, en particular de las pymes.

Los países más competitivos

Respecto al resto de países, el oro, plata y bronce corresponden a Singapur, Suiza y Dinamarca, respectivamente.
Irlanda,
Hong Kong,
Suecia,
Emiratos Árabes Unidos,
Taiwán,
Países Bajos y
Noruega.

Según la escuela de negocios, las principales razones de la subida de Singapur son sus buenos resultados en eficiencia gubernamental y empresarial. Un reflejo de la solidez de los sectores público y privado.

También destaca que la presencia de países como Suiza, en el segundo puesto, o de Dinamarca, en el tercero, indica que las ‘pequeñas economías’ prosperan y que la competitividad ya no es una cuestión de tamaño.

 

Por regiones, observamos que la economía latinoamericana mejor evaluada es la de Chile, que aparece en el puesto 44. En la misma región, le sigue Puerto Rico (49), que entra por primera vez en el ranking. Brasil, la mayor economía de Latinoamérica, figura en la 62ª posición, mientras que México, otro importante motor económico, está en la 56ª. Colombia aparece en la 57ª y Perú en la 63ª. Argentina y Venezuela cierran la lista (puestos 66 y 67).

Por otra parte, el índice resalta la creciente integración de los mercados emergentes en la economía mundial con países como China, India, Indonesia o Turquía, que han experimentado un rápido crecimiento y desarrollo en las últimas décadas. China aparece particularmente bien posicionado, en el puesto 14, solo dos por detrás de Estados Unidos. Cabe destacar que se estrenan en el ranking las africanas Nigeria (64) y Ghana (65).