Esa ha sido una breve opinión sobre mi … disiento.
(Actualización) Y tras una respuesta a la entrada y “un poco” de reflexión … dejo de disentir. Sí soy gris, aburrido y criticón.
Gris decidí serlo hace ya unos meses, gris en el sentido de que nadie me recuerde por nada que no sea por aportar algo a sus vidas, de la manera que sea. Así no quiero ser el más guapo ni el menos, ni el más ni el menos elegante, ni el más ni el menos brillante conversador, ni el más ni el menos … qué se yo. Quiero ser el pequeño hombre gris que cambió el mundo.
Y creo que eso me ha hecho aburrido, al menos en el sentido habitual del adjetivo. Lástima. Yo, os aseguro que no me aburro.
Respecto a lo de criticón … sí, es uno de mis mucho defectos. Pero es que hay mucho que criticar ahí fuera, no me lo neguéis. Somos humanos y cometemos errores, y eso deja un mundo por crititcar. La crítica, si es constructiva, es lo que ayuda a mejorar/evolucionar.