Vía @elblogsalmon, un estudio de #goalkeepers (Fundación Bill y Melinda Gates) sobre el que una entrada en @microsiervos arroja luz…

Años de teoría económica para llegar a una conclusión: los suertudos de nacer ricos, tienen más facilidad de ser ricos.

Leí la entrada La desigualdad al descubierto: el factor que influye más en nuestro futuro socioeconómico personal en el blog salmon:

…vaya por delante que, como los lectores habituales ya saben, desde estas líneas no somos de tabla rasa y todos por igual, como algunos sectores político-sociales abanderan agresivamente para justificar otros sistemas socioeconómicos.

…La clave pasa por tener un sistema que provea, incluso a las clases más humildes, de una educación básica de calidad y gratuita, que garantice una cierta igualdad de oportunidades para todos, y que les permita poder aspirar a progresar socioeconómicamente si se esfuerzan por ello.

 

En la entrada se citaba el estudio Examining inequality: how geography and gender stack the deck for (or against) you

Geografía

 

Género

 

 

Salud

Inclusión digital

El pdf del estudio en castellano.

 

Después de ver como influyen en la desigualdad:
el género
el acceso a la salud
la integración digital
la región geográfica del nacimiento

… fue curioso encontrar en @microsiervos la referencia a un estudio matemático que parece demostrar que la suerte influye más en el éxito que el esfuerzo.

El paradigma meritocrático dominante de las culturas occidentales altamente competitivas se basa en la creencia de que el éxito se debe principalmente –si no en exclusiva– a cualidades personales como el talento, la inteligencia, las habilidades, el esfuerzo o la capacidad de asumir riesgos. A veces, estamos dispuestos a admitir que un cierto grado de suerte también podría desempeñar un papel en el logro de esos éxitos materiales. Pero, de hecho, es bastante común subestimar la importancia de las fuerzas externas como la suerte en las historias individuales de éxito. – A. Pluchino. A. E. Biondo, A. Rapisarda
Talent vs Luck: the role of randomness in success and failure (2018)

En el artículo se habla de cómo la distribución de la riqueza –curiosamente en todas las sociedades y a todas las escalas– sigue la «Ley del 80:20» o Principio de Pareto y que aunque se suele creer que esto es debido a la meritocracia –los méritos e inteligencia de cada individuo– en realidad esos méritos, talentos e incluso el esfuerzo no siguen el mismo principio de distribución.

En definitiva, viendo el informe y el estudio, parece que es evidentemente más fácil ser rico si se tiene la suerte de nacer rico o en zona rica (si eres hombre parece que aún estás en mejor disposición), pues lo que te esfuerces no importa tanto.  

No se yo si era necesario hacer un estudio para llegar a esta conclusión… supongo que al menos, así, se llega con datos.