Encontré el otro día entre los papeles de mi otra mitad, casi mi otro yo por su importancia, este texto “hallado en la vieja iglesia de Saint Paul, Baltimore. 1693”

Creo que había leído alguna de sus líneas en modo cita, perfecta para el “sobre de azúcar”. La globalidad del texto, no obstante, me gustó aunque son ideas que ya trato de seguir.

Me encontré un podo “disappointed” al buscarlo en internet (por no copiarlo entero) y encontrar que existen casi ensayos sobre el mismo … Tiene una entrada en wikipedia y entre otros muchos sitios, por ejemplo ésta en Educación Musicalto whom it may concern el origen y detalles. No creo que sean interesantes, es un buen texto con independencia de su historia (creo). Ahí va la versión (una de la red, con notas de la copia en papel que me animó a volcarlo al blog).

“Camina placidamente entre el ruido y el bullicio 
y observa la paz que pueda haber en el silencio.


Hasta el punto en que te sea posible, sin rendirte, 
procura estar en buena armonía con todos.


Expón tu parecer de forma reposada y clara 
y escucha a los demás, incluso al aburrido y al ignorante,
 ellos también tienen algo que decirte.


Evita las personas ruidosas y agresivas
 que constituyen una vejación para el espíritu.


Si te comparas con otros, 
puedes volverte vanidoso y amargo 
porque siempre hay alguien que es inferior o superior.


Disfruta de tus logros, así como de tus planes.

Interésate siempre por lo que haces, 
por muy humilde que sea tu tarea
, porque es algo que siempre perdurará en las cambiantes fortunas del tiempo.


Se precavido en tus negocios 
porque el mundo esta lleno de trampas. 
Pero, que la precaución no te impida ver
 dónde está la virtud,
 pues hay muchas personas que luchan en pro
 de elevados ideales
 y, en todas partes, la vida está llena de heroísmo.


Sé tú mismo. Especialmente, no finjas afecto
s. Tampoco seas cínico respecto del amor,
porque a fin de cuentas, frente a la aridez y el desencanto, el amor es tan perenne como la hierba.
 
Toma resignadamente el consejo de los años, 
sin renunciar a las cosas de la juventud. No te preocupes por temores imaginarios,
pues muchos de ellos son producto
de la fatiga y de la soledad.


Junto con una sana disciplina, 
sé benévolo contigo mismo. 
Tú eres una criatura del universo,
 no menos que los árboles y las estrellas. 
Tienes derecho a estar aquí.


Y te resulte evidente o no, sin duda 
el universo se desenvuelve 
como debe hacerlo. 
Por lo tanto, procura estar en paz con Dios, 
cualquiera sea la forma en que le concibes y cualquiera que sean tus obras y tus aspiraciones.

En la ruidosa confusión de la vida,
procura estar en paz con tu alma.

Con toda sus farsas, trabajos y sueños rotos, éste sigue siendo un mundo hermoso.

Se alegre, esfuérzate por ser feliz.”

Mientras mezclaba los textos, he visto algunas diferencias que me han hecho buscar la versión inglesa original del poema, que os dejo a continuación:
“Go placidly amid the noise and haste,
and remember what peace there may be in silence.

As far as possible without surrender
be on good terms with all persons.
Speak your truth quietly and clearly;
and listen to others,
even the dull and the ignorant;
they too have their story.
Avoid loud and aggressive persons,
they are vexations to the spirit.

If you compare yourself with others,
you may become vain or bitter;
for always there will be greater and lesser persons than yourself.

Enjoy your achievements as well as your plans.
Keep interested in your own career, however humble;
it is a real possession in the changing fortunes of time.
Exercise caution in your business affairs;
for the world is full of trickery.
But let this not blind you to what virtue there is;
many persons strive for high ideals;
and everywhere life is full of heroism.

Be yourself.
Especially, do not feign affection.
Neither be cynical about love;
for in the face of all aridity and disenchantment
it is as perennial as the grass.

Take kindly the counsel of the years,
gracefully surrendering the things of youth.
Nurture strength of spirit to shield you in sudden misfortune.
But do not distress yourself with dark imaginings.
Many fears are born of fatigue and loneliness.

Beyond a wholesome discipline,
be gentle with yourself.
You are a child of the universe,
no less than the trees and the stars;
you have a right to be here.
And whether or not it is clear to you,
no doubt the universe is unfolding as it should.

Therefore be at peace with God,
whatever you conceive Him to be,
and whatever your labors and aspirations,
in the noisy confusion of life keep peace with your soul.

With all its sham, drudgery, and broken dreams,
it is still a beautiful world.
Be cheerful.
Strive to be happy.”