Vía Microsiervos leo esta frase de Jesús Encinar (creador de Idealista):
“Si de veras quieres empezar un negocio deja tu trabajo, reduce tus gastos y dedícate a ello a tiempo completo. Es la única manera de darle una oportunidad de éxito a tu idea.”
Es el primero de los 10 consejos que ofrece sobre como empezar una empresa y no puedo estar del todo de acuerdo. Creo que esa es una buena fórmula cuando tienes el respaldo finanaciero necesario para los primeros tiempos. Si eres un mileurista o no mucho más o el único sostén, creo que montar una empresa en tus ratos libres no deja de ser una opción muy válida, al menos si se basa en internet. Ya lo comentaba en esta entrada citando un artículo de Time titulado The New Internet Start-Up Boom: Get Rich Slow.
Aunque muchas veces he leído este conejo de absoluta dedicación, por lo “time-consuming” que es montar una empresa, creo que sólo es válido para aquellos con un buen respaldo financiero, que al menos han podido ahorrar en su empresa por tener un buen sueldo y han podido prever su futuro. Este parecer lo refuerza el segundo consejo:
-“En un proyecto lo más importante no es la idea sino el equipo que está detrás. Rodeate del mejor equipo del mundo y todo saldrá mejor. La mejor idea del mundo con un equipo mediocre no llega a ningún sitio, pero un equipo brillante puede hacer un gran negocio hasta de una idea mediocre.”
¿Piensas pagar un equipo brillante con el dinero que se supone que no tiene una empresa que empieza?? Es un gran consejo pero nuevamente para empresarios con “riñones”. No se el pasado de Jesús Encinar … pero acabo de “investigarlo” (así rápido, un par de resultados) y es fácil decir eso cuando vienes de un puesto de dirección para toda europa en una consultora multinacional en la que el sueldo anual es muy posible que sea (o fuera en esos tiempos) insultante para según que trabajadores. Una aproximación y una biografía.
Me gustaría ver consejos para montar empresas sin tener la pasta, ni el inversor, ni el business angel o el venture capital. Todas las empresas fueron pequeñas una vez. Luego se hicieron grandes (o no).