Fija objetivos que impacten positivamente en las personas que tienes cerca, que hagan del mundo un lugar mejor. 
Un objetivo exitoso y con sentido debe ser la intersección de los siguientes 3 círculos:
  1. Las cosas por las que sentimos pasión.
  2. Las cosas en las que somos buenos por naturaleza y en las que podemos aspirar a ser los mejores.
  3. Las cosas que son rentables económicamente.
En mi caso, para fijar objetivos de este tipo suelo, en lo que en GTD se llama la revisión general que se realiza una o dos veces al año, seguir el siguiente esquema basado en las pautas anteriores:
  1. Hacer un listado de posibles formas de impactar positivamente en la sociedad y hacer del mundo un lugar mejor que estén en mi mano y me motiven: esto ayuda a dotar de “sentido” al trabajo y dedicarse a algo que trascienda tu existencia.
  2. Hacer un listado de cosas en las que me encanta trabajar: esto ayuda a superar los malos tragos que la lucha por cualquier objetivo conlleva.
  3. Hacer un listado de las cosas que se me dan bien y en las que puedo ser de los mejores: esto ayuda meterte en una actividad en la que partes con cierta ventaja.
  4. Hacer un listado de actividades que son rentables económicamente: sin esta pieza, habremos encontrado un hobby fantástico, pero no podremos dedicar nuestra vida laboral al objetivo.
  5. Buscar la intersección entre todos ellos para encontrar un objetivo tangible.
  6. Definir el estado en el que deberíamos estar a 2, 5 y 10 años y pasarlo a siguientes acciones siguiendo las 4 reglas de oro de la productividad.