…me permitió derrumbar un montón de mitos y estereotipos sobre cómo se suponía que vivían y trabajaban en la Europa germánica…
Origen: La Bonilista
El primero, que vivieran para trabajar, cuando la inmensa mayoría de mis amigos cumplían escrupulosamente su horario de trabajo y no hacían ni un solo minuto extra.
El segundo, que durante ese horario se centraran por completo en las tareas que les eran encomendadas y no se dispersaran jamás en actividades sociales, como tomar un café con sus compañeros.
…si trabajar más duro que nosotros no era lo que les había permitido crear una industria de altísimo valor añadido … ¿qué carallo hacían diferente?
…uno de los múltiples factores que contribuían al éxito de su economía era la adopción generalizada del Slack…
Dejar sin asignar de forma deliberada un remanente de tiempo para ganar flexibilidad y rapidez de respuesta ante las oportunidades que se nos presenten. … muchas empresas se obsesionan en ser más eficientes, en asegurarse de que cada recurso se emplea al 100% y cada empleado produce durante cada minuto de su jornada laboral.
…ser eficiente no implica ser efectivo. Eres eficiente cuando produces un bien o servicio con el mínimo desperdicio,
pero solo eres efectivo si produces el bien o servicio adecuado, el que genera más valor a tus clientes y te devuelve mayor beneficio.
De nada sirve producir de forma muy eficiente algo que no quiere nadie.
Contar con Slack no solo te da la capacidad de absorber los imprevistos y aprovechar las oportunidades, sino que también permite que tu equipo tenga tiempo para centrarse en lo importante no solo en lo urgente. En la configuración de tu entorno de trabajo, para automatizar parte del mismo; o en generar documentación, para no tener que explicar una y otra vez cómo hacer una tarea cada vez que llega alguien nuevo. Iniciativas que no tengan un retorno inmediato, pero que pueden generar un inmenso impacto a largo plazo.
Y experimentar. Sobre cómo mejorar ese mecanismo relojero para que mida el tiempo con un 1% más de precisión, no solo un 1% más barato. O, si no eres suizo, simplemente sobre cómo hacer que tu día a día sea un poco más efectivo.
Porque contar con tiempo no planificado no significa que dispongamos libremente del mismo. La clave es que, debemos emplear nuestro Slack en iniciativas relacionadas con nuestro trabajo.
Antes de despreciar el Slack, deberían recordar que lo que realmente les hará cobrar sus bonus y escalar en la jerarquía corporativa no es el número de horas que trabajen las personas a su cargo sino los resultados que alcancen. Eficacia, no eficiencia.
El Slack introduce el interesante concepto de «capital humano» o la inversión que se realiza en personal redundante, necesario para disfrutar de esa capacidad de respuesta y de potencial mejora. Otra cosa es que sepamos rentabilizar esa inversión o la despilfarremos.
Evidentemente, el Slack no es para todos los sectores ni para todos los equipos, pero si tu empresa puede permitirse invertir en capital humano, al menos deberías plantearte si las alternativas pueden devolverte más valor con menor riesgo.