Que nadie lo llame ludita … el problema no es la tecnolgía, sino el ser humano y el uso que se hace de ella.

… La humanidad supo que podía hacer que las máquinas volaran por el aire y nadaran bajo la superficie de los mares. Sin duda era un hecho admirable y romántico… Desgraciadamente esta vasta expansión no se vio acompañada por una mejora notable en la calidad del hombre, ni en sus capacidades mentales ni en su carácter moral. Su cerebro no mejoró, pero sí funcionaba más rápido… Nuestra necesidad era imponer disciplina a una serie de hechos gigantes y turbulentos. Y hasta el momento queda claro que no hemos estado a la altura de la tarea… “

El aviso de Churchill