El concepto de transformación digital está de moda. Es la última ola de la innovación. Pero la transformación digital no debe entenderse sólo como la informatización de los procesos empresariales, como se entendía hasta ahora. La transformación digital va de la absorción estratégica de nuevas tecnologías disruptivas, todas ellas de base digital (internet de las cosas, 3D-printing, realidad virtual, big data, robótica e inteligencia artificial). El principal reto de las organizaciones en los próximos años será como interpretar, implementar e institucionalizar estas tecnologías para generar ventajas competitivas. En la industria, este reto se ha venido a denominar Industria 4.0. Pero el verdadero reto excede la industria. El verdadero reto, y la gran oportunidad, es desarrollar hospitales 4.0, universidades 4.0, escuelas 4.0, administraciones 4.0, ciudades 4.0 y países 4.0.